No todas las personas pueden invertir siempre una cantidad de dinero elevada a la hora de seleccionar las prendas que conformarán su armario, pero si se debe intentar vestir correcta y adecuadamente aunque se disponga de un presupuesto ajustado.
Para ello, debemos considerar una serie de observaciones que nos ayudarán a este propósito:
-Conocer las normas del buen vestir. Para vestir bien hoy en día, es muy importante comprender
el origen de la vestimenta masculina actual.
La década de 1930 es considerada por muchos, como la de
mayor elegancia y estilo en el vestir masculino.
Conocer los orígenes del buen vestir es de suma importancia, tanto para evitar "hacer el ridículo" como también para saber reconocer a un gentleman por la calle.
La moda del hombre clásico tal y como la conocemos hoy en
día tiene sus raíces en los trajes masculinos que se usaban en la década de
1930, con un estilo conservador y según la formalidad de épocas anteriores que darían paso a los conceptos
modernos del vestir.
Conocer los orígenes del buen vestir es de suma importancia, tanto para evitar "hacer el ridículo" como también para saber reconocer a un gentleman por la calle.
-Elegir nuestro estilo y nuestro armario. No es lo mismo elegir un traje para la oficina que para una boda, ni tampoco el estilo de un hombre maduro al de un joven, o el de un tradicional gentleman con el de un moderno dandy.
Es imprescindible que sepamos lo que queremos comunicar y también las diferentes ocasiones que se nos presentan para hacerlo.
Y para ello, lo más racional es crear un armario básico o lo que habitualmente se conoce como prendas de "fondo de armario". Debemos elegir prendas sobrias y atemporales que combinen entre sí, tanto por su corte como por su color.
-Conocer las opciones disponibles donde comprar moda que tenemos en nuestro entorno. Tanto en las tiendas en las que podemos permitirnos comprar, como en las que no.
Debemos seleccionar aquellas en las que podemos comprar trajes, americanas y/o abrigos, en las que comprar camisas, o corbatas y pañuelos, o zapatos o accesorios.
No es muy aconsejable, que por comodidad o pereza, compremos todo nuestro atuendo en el mismo establecimiento, salvo que éste, compendie totalmente nuestro estilo; algunos obran este milagro.
Otra opción equilibrada puede ser combinar prendas de boutiques más elitistas o con otras de tiendas más populares, siempre que estén en consonancia con la elegancia y el buen gusto. El buen gusto y estilo propio huye de la uniformidad de las masas.
-Leer revistas y blogs de tendencias o de moda masculina. Con ello, podremos comparar distintos estilos y añadir lo que nos guste al nuestro.
-Conocer nuestras medidas. Estas son vitales a la hora de elegir un atuendo, tanto para las chaquetas, los pantalones o las camisas.
-Distinguir la diferencia entre sastrería (bespoke) y hechos a medida (made to measure).
- Los trajes de sastrería son los que, cada detalle, está fabricado a medida, estilo y tejido, según el gusto del cliente y con un patrón hecho desde cero sobre el propio tejido y creado según la fisonomía del cliente.
- Los trajes hechos a medida (MTM) son trajes con transformaciones o modificaciones sobre papel o cartón a partir de un patrón y una talla existentes.
-Saber qué elementos son fáciles de modificar y cuáles aportan un valor añadido. Por supuesto, todos los trajes susceptibles de ser modificados nunca pueden exceder de una talla mayor o menor a la que nos correspondería por nuestras medidas, aunque siempre es preferible que éstos sean de una talla mayor, puesto que los arreglos son más factibles, que si lo son de una menor.
También es importante conocer las combinaciones de los distintos elementos para dar mayor elegancia a nuestro look: colores, texturas, accesorios, etc.
-Conservar nuestro armario en perfecto estado. Atender adecuadamente los elementos que ya poseemos, es muy importante.
Cepillar regularmente los trajes, chaquetas, pantalones y abrigos. Si la prenda tiene arrugas, ponerlas al vapor de la ducha o plancharlas en la tintorería.
Colgar los abrigos y las chaquetas en perchas anchas, nunca en perchas de plástico, pues se deforman.
-Comprar barato es comprar dos veces. No debemos caer en la tentación de comprar un "chollo" por el simple hecho de ahorrar dinero.
Es necesario que nos fijemos que la prenda no tenga taras o defectos, que nos siente bien o que se ajuste a nuestro estilo, para que podamos darle un buen y correcto uso.
Es preferible ahorrar y comprar una prenda de mayor calidad que algo barato pero que no merezca la pena. ¿Cuántas veces hemos comprado algo que, luego, no lo hemos estrenado?
Es necesario que nos fijemos que la prenda no tenga taras o defectos, que nos siente bien o que se ajuste a nuestro estilo, para que podamos darle un buen y correcto uso.
Es preferible ahorrar y comprar una prenda de mayor calidad que algo barato pero que no merezca la pena. ¿Cuántas veces hemos comprado algo que, luego, no lo hemos estrenado?
-El entalle y ajuste son vitales. En general, las arrugas en un traje son evidencia de una mala hechura:
- Los pliegues o arrugas verticales indican que la prenda de vestir es demasiado grande en ciertas partes.
- Los horizontales en forma de X por la tensión en el botón, indican que es demasiado pequeña.
-Elaborar una lista de lo que necesitamos y un presupuesto para ella. Es importante ir a comprar, sabiendo lo que necesitamos y lo que no.
De esa forma, evitamos comprar prendas innecesarias.
De esa forma, evitamos comprar prendas innecesarias.
También es aconsejable fijar un presupuesto mensual o anual para completar nuestro armario con artículos con los que podamos darle un valor añadido.
La versatilidad de los accesorios estriba en los distintos atuendos que podemos conseguir con el mero hecho de cambiar o combinar éstos y de esa forma ofrecer un mensaje más tradicional y sobrio o uno más atrevido y transgresor.
La versatilidad de los accesorios estriba en los distintos atuendos que podemos conseguir con el mero hecho de cambiar o combinar éstos y de esa forma ofrecer un mensaje más tradicional y sobrio o uno más atrevido y transgresor.
-Evitar los outlets. Inicialmente, se trata de establecimientos comerciales especializados en la venta de productos en stock o de una temporadas anteriores, con precios inferiores a los habituales o también productos con taras o defectos, a precios muy rebajados.
En muchos casos, realmente los outlets ofrecen prendas especialmente planificadas y elaboradas para su venta directa en ellos. O puede que sólo encontremos prendas de muestrario de una sola talla.
Esto implica una lógica y evidente reducción de la calidad en los productos al tener que ofrecer precios más asequibles.
Es preferible ir a las tiendas originales, incluso en época de ventas especiales o rebajas que a los outlets, salvo que sepamos que es un outlet de garantía.
Artículo escrito por Alberto Mestre en el blog:" Trajes de Novio CMoyano".
Web: http://www.comercialmoyano.com/