¿ES LA ELEGANCIA INCOMPATIBLE CON EL VERANO?

El calor es el mayor enemigo de la elegancia. Las altas temperaturas del verano son una tentación que nos brinda la excusa perfecta para desprendernos de casi toda la ropa que nos incomoda o molesta. 

Si se trata de elegir un traje de novio para una boda en los meses de julio o agosto, el dilema es mas trascendental.

Por ello y para evitar descuidar las normas básicas del buen vestir y convertirnos en esclavos de la ordinariez, deberíamos evitar las siguientes situaciones:

Ir en traje de baño y chanclas por la ciudad

A pesar de ser algo muy común hoy en día y del "todo vale por la libertad individual", debemos concienciarnos de la correcta manera de vestir en la ciudad, aún cuando apriete el calor y el termómetro se dispare.

De la misma forma que sería absurdo caminar por la arena de la playa con zapatos de cuero y traje, pasear por el centro de nuestra ciudad en bañador y chanclas es del todo un acto ridículo. 

Y por supuesto, ir con el torso descubierto, resulta completamente inadmisible y grotesco cuando se vive en sociedad.

Vestir camisas de manga corta o de tirantes

Aunque la tendencia actual es mostrar "musculo" con camisas que dejan los brazos al descubierto, una camisa de manga larga ligeramente remangada, cubriendo el codo, resulta más estética que una de manga corta. 

Y mucho menos, si la vestimos con corbata.

Es una incongruencia utilizarla como signo de elegancia y desprenderse de la chaqueta que siempre debe ir con ella..

La manga corta está reservada a los polos y a las camisetas.

Por supuesto, también debemos evitar la tentación de desabrocharnos la camisa o de llevarla por fuera del pantalón si vestimos chaqueta, y bajo ningún concepto, utilizar camisetas de tirantes, que son sólo para jugar al basket.

Llevar traje sin corbata o camisa y corbata sin americana

Si tenemos que vestir con traje, la corbata es obligatoria. El traje sin corbata es tan absurdo y poco elegante como la corbata sin chaqueta. 

Si nos encontramos en cualquiera de los dos casos, ni tendremos gusto ni estaremos "a gusto".

Si queremos prescindir de ella, lo más acertado es elegir un conjunto de chaqueta y pantalón de distinto tejido o color  y seguir siendo elegante.

Desanudar o aflojar la corbata

Otro gran error de la época estival es llevar la corbata floja o con el nudo deshecho. 

Si se utiliza esta prenda “hay que llevarla bien, si no es mejor no llevarla”.

La corbata en verano puede ser más ligera e informal pero siempre debe ir en su sitio, pero si se viste con un traje de novio, debe llevarse bien colocada, anudada y con formalidad.

Usar chaqueta con bermudas

Desde que Pharrell Williams apareció en una gala de los Oscar vestido con chaqueta (de esmoquin) y pantalones cortos (bermudas) y sin calcetines, imitarle resulta muy "happy-fashion". 

Pero ni es elegante ni de buen gusto. 

Es ir más allá de la exagerada "Sprezzatura" con la que ciertos individuos quieren hacerse notar y crear tendencia.

La elegancia no entiende de modas pasajeras ni de exageraciones pero somos libres de ir como queramos. La diferencia saltará a la vista.

Es preciso hacer una clara distinción entre lo que está "de moda" o es tendencia y por otro lado, lo que es elegancia o buen vestir. 

Habitualmente, suelen ser conceptos que se alejan bastante uno del otro.

Ottavio Nuccio Gala propone trajes sartoriales italianos, esmoquins y chaqués de una sola pieza, sin corte en la cintura para estilizar la figura.

      

Fabricados en tejidos de excelencia lana-seda, rasos de lana “140 Filo”, frescos lana Super 120’S, “New Performance”, viscosa-lanas “Doppio Ritorto.

        

ONGala es una marca italiana de prestigio, especializada en trajes de novio para "celebraciones de color sin calor".

          

Por tanto, la elegancia es absolutamente compatible con el calor. Lo que realmente es incompatible con el verano (y con el invierno) es tratar de mostrar el mal gusto como algo trendy, actual y correcto.

     

Artículo escrito por Alberto Mestre en el blog:" Trajes de Novio CMoyano".

Web: http://www.comercialmoyano.com/

  

UN ARMARIO BÁSICO Y ATEMPORAL: LOS COMPLEMENTOS

Los complementos dotan de un carácter personal y único que desemboca en una imagen completamente distinta al utilizar distintos accesorios, aún incluso manteniendo el mismo traje.

Y más concretamente, en el caso del traje de novio, le constituyen la diferenciación entre 

el protagonista del día y el resto de los invitados.

Los más importantes son:

Pañuelos de bolsillo

El pañuelo de bolsillo define, a quien lo porta, como un auténtico y elegante caballero.

El de lino blanco es el más clásico y socorrido si no se domina el arte de combinarlos. Aunque existen muchos otros tipos.

Se puede combinar de manera elegante con la chaqueta mostrándose de manera clásica y paralela a la costura del bolsillo o en forma de U invertida.

    

Camisas 

Una camisa azul pálido es el fondo que todo traje necesita para hacer combinar un difícil dibujo o una corbata con mucha personalidad.

Las camisas a rayas o incluso de un azul claro son perfectamente válidas para el día a día de la oficina pero, sin embargo, en las ocasiones más formales no son correctas, lo son las blancas, que nos permiten acudir desde a un funeral hasta a una boda.

Una de las dos (o ambas) preferiblemente, debe ser de doble puño.

Corbatas 

Una corbata azul marino combina bien con cualquier traje o chaqueta, desde los azules hasta los grises y los marrones. 

También con camisa lisa azul o blanca, de rayas o cuadros.

Hasta hace no mucho, el traje de novio imperativamente debía vestirse con corbata gris o negra. Sin embargo, en la actualidad las opciones de los novios estriban en un amplio abanico de formas, dibujos y colores.

Chalecos 

El chaleco resulta una prenda imprescindible en indumentarias de gala: chaqué,  frac y el traje de novio y en los trajes de calle puede lucirse o no, pudiendo ser este diferente a la americana o igual, estilo diplomático o de ojo de perdiz, por poner dos ejemplos.

ONGala tiene un amplio surtido de chalecos en tejidos muy variados: desde los terciopelos y tartanes, apropiados para las fiestas navideñas, pasando por los de sedas tanto lisos como brocados, jacquard, bordados o de micro diseños, hasta las lanas lisas, ojo perdiz, príncipe de gales o fil a fil, idóneos para dar un toque muy personal a nuestro traje de boda.

Y en cuanto al patrón, los puedes encontrar de una fila, cruzados, rectos o diagonales, con solapa o sin ella, etc.

 

Zapatos

El zapato Oxford es el modelo más formal, elegante y versátil de cuantos existen en la actualidad. Es idóneo para ser vestido tanto con un traje como con un chaqué.

Aunque hay diferentes tipos de terminaciones, el clásico liso es el básico.

Los Oxford de color chocolate oscuro o coñac, aun no siendo apropiados en determinados actos y a ciertas horas, aportan un toque de estilo difícil de conseguir por los zapatos negros.

Particularmente, creo que los Monks con una o dos hebillas aportan una elegancia diaria difícil de igualar por otros tipos de calzado.

Ottavio Nuccio Gala ofrece una gran variedad de zapatos que complementan al detalle la imagen de un traje de novio, según la personalidad y gusto del cliente: sleepers, derby, full brogues, etc.

 

Artículo escrito por Alberto Mestre en el blog:" Trajes de Novio CMoyano".

Web: http://www.comercialmoyano.com/

UN ARMARIO BÁSICO Y ATEMPORAL: EL TRAJE

El traje moderno no apareció hasta mediados del siglo XIX, pero los orígenes de su forma se pueden remontar a la revolución en el vestido masculino fijado por Carlos II, rey de Gran Bretaña en los años 1660. Carlos, después del ejemplo de la corte de Luis XIV en Versalles que decretó en 1666 que en la corte, los hombres tenían que usar una capa larga o chaqueta, un chaleco, un pañuelo (antepasado de la corbata moderna) una peluca y los pantalones recogidos en la rodilla, así como un sombrero para el exterior. 

El traje de novio durante varios siglos y hasta mediados del pasado consistía en un traje de calle, puesto que las economías familiares no permitían tener varios trajes y mucho menos, uno para ceremonia para uso de un solo día. 

Generalmente era cruzado y lo que le diferenciaba como atuendo de ceremonia eran los complementos como el chaleco, los gemelos, la camisa de puño doble o el corbatón lo que le conferían la categoría de una traje para ceremonia.

Aunque es difícil ver el origen de la forma moderna del traje de ejecutivo en el elaborado y coloreado vestido de la corte del siglo XVII, el patrón básico ha sobrevivido por más de cuatrocientos años con algunos ajustes, a pesar de el abandono de pelucas y de pantalones por la rodilla después de la revolución francesa; el auge de la sastrería británica, que utilizó el vapor, la presión, el acolchado y almidonado para moldear la tela de lana al cuerpo; la invención de la corbata moderna a fines del siglo XIX; y la desaparición gradual de chalecos y de sombreros durante los pasados cincuenta años.

Lo que llamamos traje moderno fue originariamente una innovación inglesa del siglo XIX en la indumentaria. 

Originariamente se llamó traje de salón y era usado solamente en el campo y en la playa. El traje del salón se convirtió cada vez más en una forma ocasional de vestido llegándose a reservar solamente para las actividades recreativas.

El traje de salón fue usado cada vez más extensamente a fines del siglo XIX como prenda de día ocasional para la ciudad hasta que comenzó a convertirse en una alternativa aceptable al conjunto de mañana como prenda para la ciudad a comienzos del siglo XX. 

Mientras, el traje de salón llegó a ser cada vez más popular, de modo que incluso los hombres más humildes tenían por lo menos un conjunto para llevar el domingo a la iglesia.

 El chaleco fue usado regularmente con el traje hasta la Segunda Guerra Mundial.

El traje de novio habitualmente se compone de:

-Levita o americana fundamentalmente en negro, azul marino, gris perla y gris marengo, incluso el blanco y el marfil. 

-Pantalón del mismo tejido que la parte superior o a contraste, según el estilo y personalidad del novio.

-Camisa de puño doble con cuello spread o wing tip.

-Chaleco del mismo tejido (monocolor) o a contraste, en colores lisos, brocados o bordados.

-Gemelos.

-Prenda de cuello: corbata, corbatón, rocheu o pajarita.

-Zapatos habitualmente negros y de cordón, pero también admite otros tipos.

-Tirantes.

- Alfiler de corbata.

-Pañuelo de bolsillo.

-Reloj de bolsillo.

Un armario básico debe contar con, al menos, dos trajes desde el punto de vista de su corte: uno recto o single breasted y otro cruzado o double breasted.

En cuanto a los colores: un traje azul marino se visten independientemente sea mañana o tarde, aunque siempre es mejor reservar este color para la tarde-noche.

El azul marino resulta tan fácil de vestir que permite ser combinado con camisas y corbatas de prácticamente cualquier color y diseño.

Para la mañana, el gris es el color más apropiado. Los trajes negros o gris marengo debemos reservarlos para la noche.

Desde mi punto de vista, vestir chaleco no sólo demuestra carácter y personalidad sino, también aporta abrigo en los meses fríos del año y disimula el estómago (si se tiene).

Lo que debemos tener en cuenta en nuestros trajes

Chaqueta.

-Largo. La chaqueta debe cubrir el asiento de los pantalones, pero su largo no debe bajar más allá del nudillo del dedo pulgar cuando el hombre se para con brazos normalmente caídos a los lados.

-Cuello. Debe ajustar perfectamente, tanto detrás como a los lados, sin formar bolsas, arrugas o protuberancias.

-Espalda. Su ajuste debe ser natural y suavemente. Es importante que no se formen bolsas ni arrugas en la línea donde el cuello se une al cuerpo de la chaqueta.

-Largo de mangas. Los puños de la camisa deben sobresalir entre 1,25 cm y 1,75 cm.

-Solapas. Deben quedar planas en la zona donde se doblan para formar el cuello de la chaqueta, desde donde descienden suavemente hasta la altura del primer botón. No han de verse, pues, levantadas ni abultadas.

-Cintura. La chaqueta, a la altura de la cintura, debe caer naturalmente, sin levantarse mucho y sin formar arrugas.

-Abotonadura. El traje más elegante es el cruzado pero si optamos por un traje recto, debemos inclinarnos por dos botones. Sin embargo, si se trata de un traje de novio, lo más acertado es de un sólo botón.

-Aberturas. Las clásicas son dos aberturas posteriores a cada lado de la cadera. Para trajes de ceremonia, lo habitual es que lleven una sola abertura central y un solo botón.

Pantalón.

-Ajuste. Ya se usen con cinturón o con tirantes, los pantalones deben descansar sobre el hueso de la cadera. Lo importante es que tengan un buen ajuste en el asiento: ni tan flojos que formen bolsas ni tan ceñidos que marquen exageradamente los glúteos. Si los pantalones quedan bien, tampoco formaran bolsa ni pliegues en la entrepierna. Actualmente no están en tendencia los pantalones con pinzas.

-Largo. Deben tocar, por lo menos, la parte superior del zapato. Puede llevarse con bajos o sin estos. Muchos pantalones sin bajos pueden tener un corte angular, de modo que resulten por detrás un poquito más largos que por delante.

Chaleco.

-Tipos. Recto, cruzado o asimétrico. En el chaleco recto no debemos abrochar el último botón, mientras que en los otros dos, debemos abrochar todos los botones.

La tendencia marcada por Ottavio Nuccio Gala para los trajes de novio 2015 ya sea traje, esmoquin o chaqué pasa por los tejidos diplomáticos, príncipe de gales y ojo de perdiz.

Artículo escrito por Alberto Mestre en el blog:" Trajes de Novio CMoyano".

Web: http://www.comercialmoyano.com/