Páginas

viernes, 23 de mayo de 2014

CABALLEROS E HIDALGOS DEL SIGLO XXI: MÁS POBRES, PERO SIEMPRE ELEGANTES






Hidalguía es nobleza que viene a los hombres por linaje o estilo




El concepto de hidalgo, fidalgo (en castellano antiguo, y común en literatura) e infanzón tiene su origen en España y Portugal y es sinónimo de noble, aunque coloquialmente se utilice el término para referirse a la nobleza no titulada. 

Hace referencia a hijo de algo o hijo de alguien. La palabra algo en este contexto denota “rico” o “riqueza”, y por lo tanto, en un principio, era sinónimo de hombre rico


En pleno siglo XXI, la hidalgía cobra fuerza entre los caballeros que intentan sobrevivir a esta maldita crisis mundial. 

Muchos de ellos, arruinados o despojados de su amplia zona de confort anterior, se niegan a renunciar a su elegancia, a claudicar de su clase, a despojarse de su estilo, si bien es cierto, que las condiciones económicas que viven actualmente no sean ni parecidas a las que tenían antaño.



Como hidalgos (y según el Quijote) deben ayudar a los más necesitados, defender causas perdidas, socorrer a damas, tener un escudero y una dama a quien dedicarle todas sus victorias. 

Hoy, además son hijos de "algo": del estilo, de la clase, la elegancia y la personalidad, que nunca perdieron. 

Conquistadores de su propia libertad, rompen esquemas y reafirman sus convicciones, siguen las tendencias sin traicionarse a sí mismos.

Su rebeldía, buen porte y desenfado les guía hoy en su forma de vestir, aunque se mantienen firmes en sus principios de elegancia y excelencia.

De imagen noble y generosa, seducen por su gusto impecable, por una imagen inmaculada, tratada al detalle y conformada de acuerdo a los cánones sartoriales de calidad.

Entre la calidez de un bohemio y la transgresión de un dandy, el hidalgo-caballero transforma la rigidez de las antiguas reglas del vestir en libertad natural e innata de acuerdo a su gusto personal y fija todas las miradas en su atuendo, estudiado pero no forzado.

Su rico mundo interior es expresado sin tapujos ni complejos al exterior, permaneciendo ajeno e inmune a las críticas y envidias que intentan "normalizarle" y "uniformarle".




Personalmente, no me gustan las etiquetas, pero si he de escoger alguna, elijo la "hidalguía" y parafraseando al poeta cordobés, Luis de Góngora y Argote:

 "Ándeme yo caliente y ríase la gente"





Artículo escrito por Alberto Mestre en el blog:" Trajes de Novio CMoyano".




1 comentario:

  1. Hidalgo antiguamente sinónimo de rico vago con dinero, ahora ésto desde luego no.

    ResponderEliminar