sábado, 3 de mayo de 2014

MISTERIOS DEL 11S: TEORÍA DE LA CONSPIRACIÓN







El fatídico 11 de septiembre de 2001 a las 8:45 de la mañana (hora local), EE.UU sufrió la mayor ofensiva terrorista de su Historia, el peor ataque desde el bombardeo de Pearl Harbor: Dos aviones comerciales se estrellaban deliberadamente contra las Torres Gemelas de Nueva York.

¿A quién no le impactaron las escalofriantes imágenes en directo del atentado del 11 de septiembre? 

La noticia dio la vuelta al mundo y causó mucha angustia. Pese a las muchas evidencias que hay de sus autores y procedimientos, las dudas y las sospechas van desde que el entonces polémico presidente George Bush conoció y no evitó el ataque para, usándolo de excusa, poder invadir Irak, hasta que el supuesto avión sobre el Pentágono fue un montaje, pasando por las explosiones internas en las bases de las torres, en los precisos momentos en que se venían abajo, o más curioso aún, que los judíos que se encontraban dentro huyeron minutos antes del atentado.

Respecto a que Bush estaba o no enterado del ataque, se dice que durante una hora y media el gobierno sabia que los aviones que habían despegado de Boston, habían sido secuestrados. La Dirección Federal de Aeronáutica los siguió en el radar y vio que se dirigían a Washington. Y a pesar que existe una ley en ese país que exige que, en casos de secuestros de cualquier tipo, la fuerza aérea debe intervenir en cuestión de cuatro o cinco minutos, no lo hizo. En Washington, la oficina del general Maher permaneció muda. De hecho una hora y veinte minutos después de producidos los secuestros enviaron un par de aviones cuando ya era todo inútil.

Otro parte de la historia, suceso que luego salió a luz, fue que el director del servicio secreto pakistaní, agencia que trabajaba estrechamente con la CIA, se reunió con Tenet, su homólogo norteamericano, en Washington. Se sabe que el pakistaní dispuso que Islamabad enviara a Estados Unidos 100.000 dólares para Mohammed Atta, uno de los atacantes de las Torres Gemelas. ¿Por qué? No se sabe, una de las tantas preguntas que el gobierno norteamericano no ha sabido esclarecer. 

Explosiones en las bases de las torres

Hasta hoy, la versión oficial del gobierno norteamericano sigue estando muy cuestionada.

Por ejemplo, tras el atentado se sabe que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencia sacó la estructura de acero de los edificios antes de ser analizada, pese a que las leyes establecen que la evidencia de la escena de un crimen debe ser guardada para un estudio forense. Por otro lado, ningún rascacielos con armazón de acero jamás se había derrumbado anteriormente. Pero de repente, ocurren los tres sorprendentes derrumbes conocidos que se vieron en vivo, dos de ellos alcanzados por aviones y un tercero no. La Administración de Bush, tampoco mostró nunca restos de importancia de ninguno de los cuatro aviones.

Otra prueba más que esgrimen los escépticos de la versión oficial es por qué no se encausó en las investigaciones, al arquitecto Aaron Swirski y al ingeniero Lee Robertson, que formaron parte del equipo constructor de las Torres, y quienes declararon tras los ataques que "esos edificios eran a prueba de Boeing" (aviones). Ya en su momento, también el físico Steven Jones, profesor de la Brigham Young University, postuló la hipótesis de una “demolición controlada de las torres”, insinuando que las torres fueron demolidas premeditadamente. La reacción fue tal que 67 legisladores estadounidense exigieron a la universidad el despido fulminante del científico.

¿Donde están los restos del avión del Pentágono?

Pero algo que realmente no deja de ser fantasioso e inexplicable, es el atentado minutos después al departamento de defensa, el Pentágono, donde supuestamente cayó otro Boeing, y que misteriosamente los bomberos del condado de Arlington, al mando de Ed Plaugher, no encontraron ni un solo trozo del avión durante las labores de remoción de escombros. Ante ello preguntas saltan en la cabeza ¿Dónde están las alas? ¿Dónde está el fuselaje de más de 1.000 toneladas y las turbinas de titanio desaparecieron fundidas por el fuego?, No obstante y más curioso aun es que "milagrosamente" pudo reconocerse en la misma zona los cadáveres de las víctimas y hasta se encontró intacto el pasaporte de uno de los terroristas. 

Ante esta incertidumbre, se dio vida a la teoría que fue un misil del ejército norteamericano, lo que impacto al Pentágono, pues los efectos destructivos indican que fue algo más pequeño que un avión lo que penetró en el edificio, sin causar daños importantes en la fachada. De hecho, atravesó varios anillos del Pentágono, abriendo un gran agujero ancho, lo cual, según los especialistas, es imposible que lo produzca el impacto de un avión.

El misterio aumentó cuando se supo que ningún canal de televisión y ningún fotógrafo independiente estuvieron autorizados a tomar imágenes de la escena en los momentos inmediatamente posteriores al atentado. Las fotografías disponibles que se difundieron, provienen exclusivamente de fuentes militares y fueron publicadas bajo estricto control.

Tragedia para invadir Iraq

A estas alturas, la respuesta parece ser obvia para muchos. De hecho, dos semanas después de los atentados del 11-S, el entonces presidente, George W. Bush, ya tenía en mente invadir Irak, según afirmó su secretario de Defensa, Donald Rumsfeld en sus memorias póstumas. Rumsfeld ratifica que Bush ordenó el ataque en marzo de 2003, después de promover una campaña durante varios meses en la que intentó vincular al gobierno iraquí con Al Qaeda y acusarlo de desarrollar un programa de armas nucleares. Acusaciones que fueron desmetidas en los años posteriores. No obstante y pese a lo cual, el presidente estadounidense, no cesó en reiteradas ocasiones de justificar la invasión.

Lo cierto en todo el abanico que expone esta historia del atentado del 11-s, es que la teoría conspirativa que señala como auto atentado o pasividad para con la tragedia parece tener tintes maquiavélicos, donde el objetivo conspirativo, era tener el sustento necesario para lograr el apoyo mundial a una invasión que termino como se sabe, por adueñarse de los grandes bancos petrolíferos de ese país.


Mitos y Leyendas



  • Las conspiraciones y teorías sobre el 11-S 
-Algunas teorías sobre el origen y desarrollo de los atentados proponen que fueron los agentes secretos de Israel o Pakistán los que estaban detrás de los ataques.

-Otras teorías están basadas en una de estas dos ideas:

LIHOP ("let it happen on purpose", "dejar que ocurra a propósito". En las que acusan al Gobierno de Estados Unidos de tener conocimiento previo de los ataques y que deliberadamente no hizo nada para prevenirlos

MIHOP ("made it happen on purpose", "hacer que ocurra a propósito". Acusan al propio gobierno de Estados Unidos de estar detrás de la organización y ejecución de los ataques. Esta teoría cuestiona la causa del derrumbe de las Torres Gemelas, y defiende que se trató una demolición controlada. Se ha usado el término "Inside Job" (trabajo interno) para referirse a los atentados. 

En ambos casos, el razonamiento es que la administración Bush quería justificar las invasiones de Irak y Afganistán, así como el recorte de las libertades civiles a nivel doméstico.


-La teoría de la demolición controlada del World Trade Center es la hipótesis que sostiene que el derrumbe del World Trade Center no fue causado por el daño del accidente aéreo que tuvo lugar como parte de los ataques del 11 de septiembre 2001, ni por los daños derivados de los incendios, sino por explosivos de demolición implantados en los edificios de antemano.


Los defensores de esta teoría, como el físico Steven E. Jones, el arquitecto Richard Gage , el profesor David Griffin, el ingeniero de software de Jim Hoffman , y el teólogo David Ray Griffin, sostuvieron que los impactos de los aviones y los incendios resultantes no podrían haber debilitado los edificios lo suficiente como para iniciar un colapso catastrófico, puesto que la temperatura máxima a la que algunas vigas fueron expuestas fue de 250º C, mientras que el acero funde a 1.500ºC . También, que los edificios no se habrían derrumbado por completo, ni a la velocidad que lo hicieron, sin el uso de energía adicional para debilitar sus estructuras.


El Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST) y la revista Popular Mechanics examinaron y rechazaron estas teorías. Los especialistas en mecánica estructural y en ingeniería estructural, afirman que el derrumbe fue inducido por el incendio y potenciado por la gravedad de los edificios del World Trade Center, una explicación que excluye el uso de explosivos. NIST no hizo pruebas de residuos de compuestos explosivos en las muestras de acero, indicando que los resultados potencialmente no serían concluyentes, y señalando que habría compuestos similares presentes durante la construcción de las torres.
En 2006, Steven E. Jones y Niels Harrit sugirieron la utilización de termita o súper-termita por agentes del gobierno con el acceso a esos materiales y a los propios edificios, para demolerlos. al haberse encontrado evidencia de nano-termita en las muestras del polvo que se produjo durante el colapso de las torres del World Trade Center.
En abril de 2009, ambos científicos junto a otros siete más, publicaron un artículo en The Open Chemical Physics Journal de Bentham Science Publishers titulado "Material termítico activo descubierto en el polvo de la catástrofe del 11-S del World Trade Center". NIST luego dijo que no había una "cadena de custodia clara" para demostrar que las cuatro muestras de polvo hubiesen provenido del sitio del WTC. Jones invitó a NIST para llevar a cabo sus propios estudios utilizando su propia "cadena de custodia" de polvo, pero NIST no investigó.

En Estados Unidos, los «Científicos por la Verdad sobre el 11 de Septiembre» (Scholars for 9/11 Truth) ponen en duda la versión oficial sobre los atentados del 11 de septiembre, señalando que ésta «viola los principios de la física y de la ingeniería». 


Después de varios años de investigaciones y la publicación de artículos y libros, esta asociación de universitarios, que reúne a personalidades del mundo científico y de medios militares, está convencida de que el World Trade Center sólo pudo ser destruido mediante una demolición controlada.
Las investigaciones han llevado a estos científicos a la conclusión de que el gobierno estadounidense no sólo sabía de los atentados sino que los planificó. Ahora se han dado a la tarea de utilizar todos los medios a su alcance, como la organización de conferencias y la publicación de artículos, para hacerlo saber al pueblo.
Esta asociación, a la que pertenecen unas cincuenta personalidades, fue fundada por David Ray Griffin, ex profesor de teología y autor de The New Pearl Harbor (2004) y The 9/11 Commission report: omissions and distorsions (2004). La dirige Morgan Reynolds, profesor emérito de economía en la Universidad A&M, de Texas, y ex consejero del presidente George W.Bush. La asociación cuenta además con el apoyo de Andreas Von Bulow, ex ministro alemán de Investigación y Tecnología, autor de Die CIA und der 11. September. Internationaler Terror und die Rolle der Geheimdienste y miembro de Axis for Peace.
En 2005, el millonario Jimmy Walter ofreció un millón de dólares a quien lograra probar que las Torres Gemelas del World Trade Center pudieron desplomarse sin la utilización de explosivos. Ni siquiera los propios expertos oficiales se han atrevido a tratar de aceptar el reto. Nadie ha reclamado el premio.

Para las autoridades estadounidenses, se trata de un caso cerrado. Sin embargo, la explicación oficial no satisfizo a todos y subsiste una serie de preguntas sin resolver, que lleva a escépticos de todo el mundo a afirmar que en este caso no se ha revelado toda la verdad.


La propia caída de las torres fue recibida con reservas por quienes no podían aceptar que dos rascacielos -que en las especificaciones de su diseño contemplaban la posibilidad de ser impactados por  aviones- se derrumbaran poco después de las colisiones.


La mayoría de escépticos niega la lógica del desplome no provocado de las Torres Gemelas, debido a la particularidad de su diseño: un núcleo de acero rodeado por una estructura desprovista de columnas y dependiente de la coraza exterior. 

Lo que les resulta aún más increíble es el colapso de la Torre 7  del World Trade Center (WTC) -la cual no fue impactada por los aviones- y que tiene todas las características y síntomas de una demolición controlada: "Hablamos de un edificio de 47 pisos que, a las 5:20 de la tarde del 11 de septiembre, se derrumbó sobre su propia estructura" -recuerda Dylan Avery, director del documental Loose change, que examina el misterio del WTC-. 

Allí se ubicaba la oficina más grande de la CIA fuera de Washington, una sede del Departamento de Defensa y la mayor oficina de campo del Servicio Secreto. El edificio era sede de numerosas agencias gubernamentales y documentos oficiales, así que es evidente que, "si un edificio iba a colapsar esa tarde, a velocidad de caída libre, fuera precisamente ese". También llama la atención que medios como BBC informaran de su desplome antes de que ocurriera.



  • Los otros dos aviones

El ex presidente George W. Bush admitió que el 11 de septiembre del 2001 dio la orden de derribar cualquier avión comercial que volara en áreas restringidas.


Hay quien cree aún que eso fue lo que pasó con el vuelo 93 de United Airlines, que según la versión oficial se estrelló porque los pasajeros se rebelaron contra sus secuestradores y que gracias a eso, no llegó a su blanco.

El que sí lo hizo fue el vuelo 77 de American, que se estrelló contra El Pentágono. Los que creen que hay algo raro en esa historia señalan que el avión tuvo que haber realizado un giro de 270 grados en un espacio muy limitado para tomar ese rumbo, algo que sólo puede hacer un caza.


Dicen que volar a 700 kilómetros por hora, a tan poca altura, no es tarea para pilotos novatos. Y señalan como inconcebible que las cámaras de seguridad de la zona captaran la explosión en El Pentágono, pero no el avión que lo embistió. Esto lleva a los dudosos a asegurar que fue un misil estadounidense el responsable de la conflagración, y que el Boeing 757-200 habría sido destruido en el aire.

La evidencia ofrecida por el gobierno de que un Boeing 757 del vuelo 77 impactó el Pentágono son los restos de cuerpos y partes de cuerpos que dicen haber encontrado, que serían los suficientes como para confrontar los ADN de cada pasajeros o tripulantes con las listas de pasajeros de los aviones o de la tripulación. Pero, simultáneamente, no se encontró ninguna maleta, ni restos del fuselaje, ni del ala, ni de la cola ni de nada. Estas ausencias de todos estos elementos se atribuye a la “vaporización” del metal debido a la alta velocidad del impacto y al “intenso fuego”. Pero ¿cómo se compaginan la “vaporización del metal” con la capacidad de recuperar cuerpos con carne y sangre?




  • Figuras en el humo



Algunos creen ver figuras y caras relacionadas con el demonio en el humo de las torres gemelas.







  • El hombre que predijo el 11-S
Aunque pocos lo saben, William Cooper profetizó los sucesos del 11-S. Este locutor, conocido por sus teorías conspirativas, que abarcan desde ovnis hasta la secta de los illuminati, dijo en junio del 2001, en su programa de radio de onda corta, que era "inminente un ataque devastador" del que culparían a Osama Bin Laden, pero que en realidad sería obra del Gobierno.

Tras los atentados, Cooper insistió en sus señalamientos. Murió apaleado por la Policía en noviembre de ese año, cuando iban a arrestarlo por no pagar impuestos.



  • 'The falling man'
Es la fotografía más sobrecogedora y polémica: se cree que hasta 200 personas saltaron al vacío desde las Torres Gemelas tras los ataques del 11 de septiembre.



  • Nostradamus
Hay quienes piensan que se cumplió una de las profecías de Nostradamus :


"En la ciudad de dios habrá un gran trueno dos hermanos destruidos por el caos, mientras la fortaleza resiste, el gran  líder sucumbirá, la tercer gran guerra comenzará cuando la gran ciudad esté en llamas".

  • Historias de Nueva York
Posterior a la caída de las torres surgieron algunas historias: entre ellas, se escucha la de un matrimonio que acude a Nueva York de viaje de placer y mientras pasean por una de las calles turísticas de la ciudad observan como a una persona desconocida se le cae una cartera al suelo; entonces ellos recogen rápidamente la cartera y se la dan. Tras dársela descubren que es un árabe y este, en agradecimiento, les revela un secreto. Ese secreto es ni más ni menos que no se paseen por Nueva York durante el mes de septiembre por su propia seguridad.

  • Billete de 20
Según esta teoría, al doblar geométricamente un billete de 20 dólares, se pueden ver humeando las dos torres, el pentágono y el nombre de pila de Bin Laden, Osama.



  • Cuatro mil  judíos no acudieron a trabajar el 11 de septiembre.
  • Algunas personalidades norteamericanas fueron avisadas para no volar ese día




-Explosiones:

http://www.youtube.com/watch?v=WTbGjgLm_aI


- Teorías conspirativas:

http://www.youtube.com/watch?v=Rma5P5QNJ0Q



Bibliografía:

- Expedienteoculto.blogspot.com

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