jueves, 19 de diciembre de 2013

¿BESPOKE, MADE TO MEASURE O READY-TO-WEAR?







Hoy quiero hablaros de las diferencias que existen entre el "bespoke", el "made to measure" y los que pretenden pertenecer a cualquiera de ellas con un traje “ready-to-wear” de confección en serie.

El término "bespoke o sastrería" se deriva de verbo to bespeak o "hablar de algo". Específicamente, significa "dar un encargo a realizar". 

La sastrería es un arte que consiste en la creación de prendas de vestir masculinas personalizadas de forma artesanal, diseñadas, cortadas y cosidas a mano sobre el tejido, de acuerdo con las medidas y preferencias de cada cliente, con un patrón de papel único.





En las sastrerías de Londres, un traje es estudiado y confeccionado con un mínimo de 50 horas de trabajo artesano excelso, según la norma de los miembros de la Savile Row Bespoke Association, unión gremial que agrupa a los grandes y de la que son miembros tanto el bicentenario Henry Poole como ese joven talento llamado Ozwand Boateng.



Un traje bespoke tiene una infinidad de ventajas: servicio personalizado según el gusto, estilo y elección del cliente, es 100% artesanal, está perfectamente adaptado al cuerpo del cliente, asesoramiento cualificado y su durabilidad  es notablemente superior a la de cualquier traje fabricado industrialmente. Y quizás una gran desventaja: el precio.



Las cuatro reglas fundamentales que se deben reunir para lograr la perfección y la excelencia en la sastrería son:

  1. Excelente tejido.
  2. Exquisito corte.
  3. Perfecto entalle.
  4. Óptima costura. 


"Made to measure" o "hecho a medida" (MTM) es el concepto más cercano al pensamiento y cultura sartorial, dentro del amplio contexto de los "ready to wear o listos para usar".


Generalmente se confecciona el traje en la misma fábrica, solo que de manera individual. En lugar de hacer un lote, las medidas específicas son introducidas en un ordenador principal y se corta el traje, fiel a las dimensiones personales del cliente: pecho, cintura, cadera, longitud de la manga, bajo del pantalón y perímetro de cuello a partir de un patrón base.


A diferencia de la sastrería, que tradicionalmente implica sólo costura a mano, los MTM utilizan la costura a máquina y a mano, requieren un menor número horas y de accesorios, lo que resulta en un menor tiempo de espera y un menor precio sin olvidar la excelencia. 


Podemos decir que se trata de trajes semi-artesanales, pues incluyen procesos artesanales y otros, mecanizados. 

Un traje "made to measure" tiene prácticamente las mismas ventajas que un bespoke, a excepción de su total artesanía, pero además, su relación calidad/precio es excelente.





"Ready to wear" o "listo para usar" (RTW). También llamado "off the rack". Se refiere al corte, fabricación y confección del traje en serie, con medidas y drops establecidos de forma generalizada. 


Todo se encuentra mecanizado y el toque manual apenas existe.



Fue iniciado por los italianos en la década de 1950, que segmentaron la forma (drop) del traje masculino en diferentes tamaños para la producción en masa. 


Process of a custom suit

La gran mayoría de los trajes del mundo ahora se hacen de esta manera.



La ventaja del "ready to wear" es, básicamente, su menor precio y su gran variedad.






Con un ejemplo podremos clarificar más aún las diferencias entre los tres conceptos:

"Made to measure es la personalización de una casa que se va a construir o que se está construyendo en una nueva urbanización de lujo con la ayuda del promotor o el constructor. 
Bespoke es hacerse uno mismo la casa entera como uno desea, en su propia tierra y con la ayuda de un arquitecto y un contratista. 
Ready to wear es comprar una casa de una promoción ya construida y finalizada en un barrio de la ciudad, tal y como la pensó el arquitecto que la diseñó, sin posibilidad de hacer cambio alguno".

Un gran traje realizado por un maestro sartorial cuesta más de 3.000 euros, uno a medida en torno a los 1.000 euros y el "ready to wear" unos 300 euros, incluso menos. Por esta razón estrictamente económica, más del 90% de los trajes que hoy se venden en el mundo son producidos en serie. 

Preguntarse si merece la pena gastar diez veces más, en el caso del bespoke o tres veces más, en el caso del made to measure, dependerá tanto de lo mucho que se valore la marca del traje como de la calidad de los materiales utilizados y la confección del traje, para que siente impecable.

Sin embargo, un reducto de poderosos y elegantes caballeros permanece inalterable frente al prêt-à-porter sostiene con sus encargos la haute couture internacional masculina. En Italia e Inglaterra, mecas de la alta sastrería, muchos varones locales siguen confiando aún su vestimenta al sastre.


Algunas firmas internacionales que representan esta excelencia son las sartorias italianas como Brioni, Kiton, Corneliani o Canali y las bespokes británicas de Savile Row como la pionera Henry Poole fundada en 1.806 o la prestigiosa Anderson & Sheppard, en 1906.

A veces, los cavaliere italianos prefieren la impecable factura inglesa, con sus chaquetas perfectamente armadas, sus dogmas sobre el estilo y su legendaria pañería. Por otra parte, muchos gentlemen británicos aprecian el 'aire' y la libertad de movimientos que proporciona un traje a medida italiano, o la calidad de las modernas y finísimas lanas fabricadas en Italia en los últimos años. 

Los asiduos de grandes sastrerías como Kiton o Brioni, en Italia, o Henry Poole, Huntsman o Anderson & Sheppard en Londres, suelen ser hombres de fama universal: actores de cine, millonarios, reyes y príncipes, estrellas del rock o ejecutivos de éxito. Pagan cara la seguridad de llevar el atuendo perfecto y único, y permiten gustosos que sus sastrerías exhiban sus nombres en su lista de clientes. 

El Bespoke es un proceso fascinante y maravilloso, pero también puede llegar a ser frustrante: pocos sastres son capaces de confeccionar un traje excelente y pocos clientes son capaces de gastar esas sumas de dinero. 

Pero tal es la influencia de los trajes exclusivos que algunas marcas de lujo, como es el caso de Ottavio Nuccio, ofrecen servicios de MTM: el cliente elige el diseño, se le toman medidas y sólo tiene que esperar unas semanas para tener un traje que se adapte perfectamente a su cuerpo y a su estilo. Por ello, la principal característica de los trajes de Ottavio Nuccio es siempre la búsqueda de la excelencia, tanto en los tejidos utilizados como su ajuste o entalle personalizado de sus modelos, sin olvidarse de un asesoramiento personal respaldado por una formación continua reconocida en el mundo sartorial.

Al final, la elección entre el bespoke, MTM y RTW significa decidir cuánto te importa la forma, la calidad y el estilo, así como el precio.




Artículo escrito por Alberto Mestre en el blog:" Trajes de Novio CMoyano".




   

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